En Estados Unidos y otros países occidentales, es común comenzar el día con una taza de café. Sin embargo, muchas personas desconocen que tomar café al mismo tiempo que ciertos medicamentos puede alterar su eficacia. Investigaciones han demostrado que el café puede acelerar el tránsito de los alimentos a través del sistema digestivo, afectando la absorción de algunos medicamentos en el torrente sanguíneo.
Los efectos del café incluyen cambios en la absorción, distribución, metabolismo y excreción de numerosos fármacos. Es importante conocer estos medicamentos para asegurar su efectividad.
La hipertensión es una condición común que afecta a millones de personas en Estados Unidos. Dentro del tratamiento farmacológico destacan medicamentos como el verapamilo y el propranolol. Estos fármacos actúan reduciendo la frecuencia cardíaca, facilitando el trabajo del corazón.
Sin embargo, según el Centro para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos, tomar café al mismo tiempo puede disminuir la cantidad de medicamento absorbido por el cuerpo, resultando en un control inadecuado de la presión arterial.
Según la Asociación Estadounidense de Diabetes, las personas con diabetes deben ser cautelosas con su consumo de café, especialmente si lo acompañan con azúcar o leche, ya que estos ingredientes pueden elevar rápidamente los niveles de glucosa en sangre. Además, la cafeína por sí sola puede interferir con la eficacia de medicamentos para la diabetes, aumentando los niveles de insulina y azúcar en la sangre.
Según estudios de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, los medicamentos antipsicóticos, como la fenotiazina, clozapina, haloperidol y olanzapina, son esenciales para el tratamiento de esquizofrenia, manía y otros trastornos mentales. Estas sustancias inhiben neurotransmisores o bloquean receptores en el cerebro. Beber café puede interferir con la absorción de estos medicamentos, disminuyendo su efectividad. Para asegurar el mejor resultado, es recomendable separar la ingesta del medicamento del consumo de café.
El Alzheimer, una enfermedad degenerativa del cerebro, afecta principalmente a personas mayores de 65 años. Según el Instituto Nacional sobre el Envejecimiento, se suelen prescribir medicamentos como el donepezilo, la galantamina y la rivastigmina para tratar esta condición. La cafeína de la taza de café diaria puede reducir la cantidad de medicamento que llega al cerebro al reforzar la barrera hematoencefálica. Esto disminuye la eficacia de estos fármacos, que están diseñados para proteger la función cognitiva y el neurotransmisor acetilcolina.
El asma es una enfermedad crónica que afecta los pulmones, causando dificultad para respirar, tos y opresión en el pecho. Broncodilatadores como la aminofilina y la teofilina son recetados para aliviar los síntomas del asma. Tomar café, que también es un estimulante, puede potenciar los efectos secundarios de estos medicamentos, como dolores de cabeza e inquietud, y puede reducir la cantidad de medicamento absorbido por el cuerpo, afectando la eficacia del tratamiento, según la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
6- Medicamentos para el resfriado o las alergias
Los medicamentos para el resfriado y las alergias a menudo contienen pseudoefedrina, un estimulante del sistema nervioso central. La combinación de este tipo de medicamentos con el café puede provocar inquietud, insomnio y otros efectos secundarios. Antihistamínicos como la fexofenadina también pueden sobreestimular el sistema nervioso cuando se toman con café. Consultar con un profesional de la salud sobre la combinación de estos medicamentos con café es siempre una opción prudente.
7- Antidepresivos
El uso de antidepresivos como la fluvoxamina, amitriptilina, escitalopram e imipramina ha aumentado significativamente, especialmente entre adultos jóvenes. Estos medicamentos, según el Centro para el Control y Prevención de Enfermedades de EE.UU pueden metabolizarse de manera diferente si se consumen junto con café, reduciendo la cantidad de medicamento que el cuerpo absorbe y aumentando los efectos secundarios de la cafeína, como insomnio y palpitaciones cardíacas.
8- Medicamentos para la osteoporosis
La osteoporosis, que hace que los huesos se vuelvan frágiles, es tratada con medicamentos como el risedronato y el ibandronato. Tomar estos medicamentos junto con café puede reducir significativamente su absorción y efectividad. Por esta razón, se recomienda consumir estos fármacos exclusivamente con agua y antes de la ingesta de cualquier alimento o bebida.
9- Medicamentos para la tiroides
El hipotiroidismo, una condición en la que la glándula tiroides no produce suficientes hormonas, se trata con levotiroxina. Tomar café al mismo tiempo que este medicamento puede reducir su absorción hasta en un 50%, disminuyendo su eficacia. Para lograr los mejores resultados, se debe tomar el medicamento con agua y esperar un tiempo antes de consumir café.
10- Melatonina
La melatonina es una hormona que regula el ciclo del sueño y se vende como suplemento para tratar problemas de insomnio. Según la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, la cafeína en el café puede contrarrestar los efectos de la melatonina, dificultando el sueño y haciendo que el suplemento sea menos efectivo. Para mejorar la calidad del sueño, es aconsejable separar la ingesta de melatonina y café. Infobae